Incluir el servicio ambulatorio en un hospital brinda la oportunidad de atender a pacientes que no requieren hospitalización, lo que ayuda a descongestionar las instalaciones y a reducir costes al sistema de salud en general y tiempos de espera a los pacientes, lo que implica una mejor gestión a todos los niveles. Además, permite ofrecer atención médica oportuna a personas con necesidades de cuidados menos intensivos, lo que contribuye a la prevención y manejo de enfermedades.
El servicio ambulatorio en un hospital, además, permite llevar a cabo procedimientos médicos, consultas y tratamientos sin necesidad de hospitalización. Esto beneficia a los pacientes al permitirles regresar a sus hogares el mismo día, lo que puede reducir el estrés y la incomodidad asociados con cualquier estancia hospitalaria especialmente las prolongadas.
Además, el servicio ambulatorio es una forma eficiente de utilizar los recursos del hospital al permitir que se atienda a un mayor número de pacientes sin ocupar camas hospitalarias. Esto es especialmente importante en situaciones de alta demanda o emergencias.
En resumen, incluir el servicio ambulatorio en un hospital es crucial para ofrecer una atención médica integral, eficiente y accesible a la comunidad.